UN DIVORCIO LEGAL Y EMOCIONAL

Consejos e información útil para afrontar un divorcio o una separación con niños, desde el punto de vista legal y emocional de una abogada experta

Hoy os presentamos un post muy especial en colaboración con Agustina Rico, abogada, Licenciada en Criminología y Mama Legal. Tanto su experiencia profesional como la maternidad la han llevado a crear un concepto de despacho de abogados muy especial, en el que, además de dar soporte legal, busca una conexión real con sus representados, empatiza con ellos y se esfuerza al máximo por entender sus necesidades e inquietudes para resolver sus conflictos de la forma más adecuada.

A veces llega un momento en el que las relaciones de pareja terminan y si ya de por sí es complicado encajar una ruptura sentimental para los miembros de la pareja todavía lo es más para los hijos. En una separación o divorcio hay muchas teclas que tocar, muchos aspectos legales que tratar y más aún cuando hay hijos, porque hay que dejar bien claro el tipo de custodia, establecer pensiones de alimentos, regímenes de visitas, así como los términos en los que se reparten los bienes, el domicilio conyugal, pensiones compensatorias, etc. Por ello, es importante dejarse asesorar por abogados expertos ya que es conveniente alcanzar un buen acuerdo que no perjudique a ninguna de las partes, por lo que personalmente intento una separación de mutuo acuerdo siempre que las circunstancias lo permitan y así lo deseen las partes, por sus beneficios.

Los beneficios de llegar a un acuerdo

Varios son los motivos por los que es preferible llegar a un acuerdo entre los cónyuges:

• el principal, desde mi punto de vista, es por el bien de los hijos
• en segundo lugar, una mejor relación futura entre los cónyuges
• la salud mental de todas las partes (se verá menos afectada)
• se trata de un procedimiento mucho más sencillo, más rápido y más económico que un divorcio contencioso.

Como abogada conozco bien los trámites, cómo redactar la demanda, un convenio regulador en el que recoger los pactos a los que han llegado las partes, y prestar el asesoramiento adecuado para las necesidades de cada familia pensando en un futuro. Y también conozco de cerca el sufrimiento de las familias, de los hijos, los daños colaterales de la separación o del divorcio, que en ocasiones pueden llegar a ser más dolorosos que la ruptura en sí.

Cada pareja es un mundo al igual que cada familia… por este motivo, cuando llevo un procedimiento de este tipo, me gusta generar confianza, dar seguridad y tranquilidad, así como empatizar con las partes, del mismo modo que me gusta orientar sobre la mejor forma de sobrellevar la ruptura en el caso de que haya hijos.

Aunque no forma parte de la labor del abogado, no puedo pasar por alto ofrecer una serie de consejos sobre cómo conviene tratar a los hijos tras la separación conyugal sobretodo dependiendo de su edad. Es realmente importante tomar decisiones bien pensadas y meditadas evitando hacerlo movidos por la ira, el resentimiento y una serie de emociones que nos lleven a decidir de forma inadecuada el futuro de nuestra familia, de nuestros hijos.

Sabemos que tras la ruptura hay una fase de duelo como en cualquier pérdida y no podemos olvidar que nosotros hemos perdido a nuestra pareja pero que nuestros hijos también sienten que se ha roto su familia, se pueden sentir desamparados, con miedo a lo desconocido, a no saber qué va a pasar con ellos, sentirse culpables por pensar que tienen algo que ver con la separación, la incertidumbre de no saber con quién van a vivir, sufriendo al ver a sus padres discutir y un largo etcétera.

La experiencia nos muestra que son los menores la parte más débil de la ruptura y por este motivo considero que hay que tener en cuenta determinados aspectos que pueden contribuir a que los hijos sobrelleven mejor la separación de sus padres y así lo aconsejamos a nuestros clientes siempre, y haciendo todavía más hincapié cuando el divorcio va a ser contencioso porque no ha sido posible llegar a un acuerdo entre las partes.

Formas de proteger a nuestros hijos durante la separación o divorcio:

1. Es fundamental explicar a nuestros hijos que nos vamos a separar, dejar que nos pregunten todas las dudas, saber escucharles, aportándoles tranquilidad, seguridad y amor y, si la separación es definitiva, hacerles entender que no pueden hacer nada para evitar la ruptura, siempre adaptando la explicación a la edad del menor.
2. La importancia de trabajar el respeto y el afecto hacia el otro progenitor. La ruptura se ha producido con la pareja y no con los hijos, para ellos seguimos siendo sus padres y no tenemos que mostrar nuestro rencor delante de ellos.
3. Hay que evitar hablar mal del otro progenitor, descalificarlo, insultarlo… a los niños les duele, y mucho.
4. Hay que evitar a toda costa discutir en presencia de nuestros hijos, no tienen porqué pasar un mal rato ni vivir situaciones que pueden perdurar en su memoria durante mucho tiempo.
5. No culpabilizar de la ruptura al otro progenitor delante de nuestros hijos. Ellos no tienen porqué ponerse del lado de ninguno, ni pensar que uno de sus padres es el bueno y el otro el malo. Los motivos reales de la separación deben quedar entre los padres.
6. Nuestros hijos se deben sentir más queridos y reconfortados que nunca. Se les debe dejar muy claro que sus padres se han separado, pero les quieren mucho y eso no va a cambiar, que seguirán pasando tiempo juntos y la ruptura no tiene porqué perjudicar su relación.
7. Creo que nuestros hijos no deberían tener que pasar por la difícil decisión de tener que escoger entre sus dos padres, son los adultos los que tienen que valorar el tipo de custodia y el régimen de visitas sin preguntar a los hijos y ponerlos en un grave aprieto para tomar este dura decisión. No debe recaer sobre sus hombros esta responsabilidad.

Cuando no hay margen para acuerdos…

Cuando ha sido imposible llevar el divorcio por los cauces del mutuo acuerdo hay que extremar todavía más las precauciones con nuestros hijos. En el divorcio contencioso es posible que los menores tengan que declarar ante el Fiscal y ante el equipo de psicólogos del Juzgado y, según la edad, incluso declarar en juicio con lo que esto comporta emocionalmente, suponiendo además un gran desgaste para el menor.

Los cónyuges suelen usar todas sus armas en juicio contra quien fuera su pareja, transformándose en enemigos, entramos en demandas y juicios que suelen terminar en luchas encarnizadas, interrogatorios, acusaciones, venganzas, que no hacen más que daño a las partes y no aportan ninguna solución a la familia.

Creemos que es importante contar con profesionales que nos den muestras de apoyo emocional durante todo el proceso legal, que el cliente sienta que puede confiar en su abogado y sentirse totalmente respaldado por él, así como buscar ayuda emocional y psicológica, a fin de cerrar una etapa y volver a recuperar las riendas de nuestra vida.

Agustina Rico es Abogada y Licenciada en Criminología y lleva ejerciendo más de 12 años. En su despacho, Mama Legal, da cobertura a las necesidades más amplias de las familias, defendiendo sus intereses, acompañándolas desde el embarazo, parto y durante toda la vida de sus hij@s, prestando el apoyo y conocimiento legal necesario durante la maternidad y paternidad en lo concerniente a derechos laborales y conciliación. En lo que se refiere a divorcios y separaciones, intentan que sean lo menos traumáticos posible para las parejas y, especialmente, para sus hijos, acompañándolos desde la cercanía.

CONTACTO:

Podéis encontrarla en su web, Mama Legal, en su página de Facebook y vía e-mail en agustinarico@icab.cat.

Si te ha parecido interesante este artículo, te recomendamos que eches un ojo a la colaboración que hicimos con la Coach de Rupturas Sentimentales Cristina Rodríguez, sobre “Cómo afrontar un divorcio con niños“, y que colabora estrechamente con Mama Legal para ofrecer un servicio completo y muy especializado.