Preciosas y divertidas manualidades navideñas para disfrutar con los niños cuando el frío arrecia. Los materiales son muy fáciles de encontrar, y fácilmente sustituibles por otros que tengamos por casa, para que la diversión no pare!
Siluetas de pueblos y figuras de Navidad…. Preciosas, quedan bien en cualquier lado y, aunque no lo parezca, es una manualidad fácilmente adaptable a cualquier edad! Si bien las de la foto son perfectas para niños un poco mayores (están hechas con un tablero de madera fina, cortadas con una segueta y pulidas con papel de lija por los perfiles) también quedan preciosas hechas con cartulina gruesa. Sólo tenemos que dejar a los peques que den rienda suelta a su imaginación dibujando con un lápiz siluetas de casas, muñecos de nieve o cualquier otra cosa que se les ocurra, que posteriormente recortaremos con unas tijeras (las zonas centrales, claro, mejor un adulto con un cutter o unas tijeritas pequeñas y con punta). Para rematar, unas velas led (estamos en fiestas, evitemos disgustos!) en la parte de atrás et voilà! Ya tenemos una preciosa decoración para colocar en cualquier estantería 🙂
Bolas de Navidad súper personalizadas! Una manualidad barata (podemos comprar bolas irrompibles en cualquier supermercado o tienda “multiprecio”, si es que no tenéis un par de sobra por casa), divertida, y un bonito recuerdo para toda la vida. Los niños disfrutarán muchísimo decorando bolas que luego podremos utilizar en el árbol, como complemento a un centro de mesa o para una guirnalda. También son un regalo entrañable para la familia y, además de las bolas, sólo necesitáis un buen mantel de plástico o hule (si queréis que vuestra mesa sobreviva;)), unos pinceles, un bote de agua, cualquier trapo (o papel de cocina, para limpiar los pinceles entre color y color) y unas cuantas témperas de colores.
Figuras de fieltro para decorar el árbol, para los niños/as amantes de la costura! Sólo necesitamos un poco de fieltro de colores (ahora venden paquetes con colores variados, perfectos para estas ocasiones!), unas tijeras, hilo, aguja y un poco de imaginación! Existen patrones preciosos sólo con una búsqueda de Google, aunque siempre es más divertido hacer las tareas previas de diseño. Árboles de Navidad, renos, muñecos de nieve, estrellas o muñequitos de jengibre… seguro que se sentirán muy orgullosos colgando sus creaciones en el árbol familiar o en las puertas de sus cuartos!
Un bonito Centro de mesa de Navidad ó “la excusa perfecta para darse un paseo por el campo”. Coger unas cuantas bolsas y a coger piñas!!! Para estas manualidades todo vale, ramitas, piñas, hojas e incluso piedrecitas, y no suele hacer falta irse muy lejos. Coger cualquier recipiente de casa, bien sea un cestito (como los del pan) o un cuenco bonito, y rellenarlo con los pequeños tesoros que los niños han ido encontrando. Yo suelo colocar velas led en el centro (lo sé, no tiene tanta magia… pero hoy en día están muy bien hechas y con niños pequeños alrededor se queda uno mucho más tranquilo!). Podéis adornarlo también con rodajas secas de naranja, ramitas de canela o frutos secos, para que le den más encanto y un aroma especial, e incluso dejar caer un poco de purpurina por encima (a los peques les encanta!!).
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